Siempre que conducimos, estamos expuestos a sufrir algún tipo de incidente sin importar si lo hacemos con la mayor seguridad y precaución. Por ejemplo, uno de los contratiempos más comunes que se suelen encontrar en la vía son los pinchazos en las ruedas, estos suceden a la orden del día, de forma imprevista y no importa si antes de salir revisamos que las ruedas estaban en perfecta condición.
Llegados a este caso, al igual que para realizar cualquier otra tarea mecánica, para cambiar una rueda pinchada siempre hay unos conductores más hábiles y experimentados que otros. Y si es verdad que no pueden multarnos por no saber hacerlo o ser expertos en otros aspectos mecánicos, puede suceder que la tarea recaiga en nuestras manos y por nuestra seguridad y la de nuestros pasajeros, debamos hacerla de la forma correcta.
Para esto, no solo debes manejar ciertos conocimientos básicos sobre el proceso, sino que también hay que tener fuerza, tanto para colocar la rueda, como para quitar y apretar los tornillos. De hecho, justo porque realizar este cambio no es fácil, no todo el mundo está preparado para ello.
Por supuesto, siempre puedes llamar al servicio técnico de confianza para que se ocupe de este incidente por ti, pero si estás en alguna situación en la que te ves en la obligación de hacerlo tu mismo, Ruedas LLopis, especialistas en neumáticos, te explican como hacerlo de la forma correcta:
Cómo cambiar una rueda pinchada paso por paso
1- Colocar el coche en una zona segura, llana y que no deslice.
2- Es obligatorio que nos pongamos el chaleco reflectante de seguridad, encendamos las luces de emergencia y coloquemos los triángulos a unos 50 m de donde está el coche.
3- Para levantar el coche, no debe haber ningún pasajero a bordo.
4- Debes tener siempre en tu maletero el gato, junto con las herramientas para aflojar las tuercas, una rueda de repuesto (según modelos), guantes y todas las herramientas necesarias.
5- Ahora toca determinar si nuestro coche es de tracción delantera o total. Para hacerlo, debes insertar una marcha para que el motor bloquee la rueda (obviamente apagado).
6- Pon el gato sin levantarlo todavía. Para montarlo debes cuidar que la base esté sobre una superficie lisa y que no se hunda, y si esto no es posible, hay que ayudarse con una piedra, ladrillo u objeto muy resistente. El punto de apoyo con el coche no puede ser cualquiera al azar, hay que mirar en los bajos un lugar donde encaje perfectamente.
7- Las tuercas de la rueda suelen ir muy apretadas, pero son más fáciles de quitar si lo hacemos antes de elevar el coche. Utiliza la herramienta para aflojarlas, pero todavía no las saques del todo.
8- En este momento puedes empezar a elevar el coche hasta el nivel en que la rueda pinchada quede suspendida en el aire. Ahí es cuando podrás quitar las tuercas y retirar la rueda. Aquí debes tener cuidado con el peso, ya que a veces las llantas son muy grandes y pesan mucho.
9- Saca la rueda de repuesto de la zona inferior del vehículo y guarda en su lugar la rueda pinchada.
10- Ahora es el momento de poner la rueda de repuesto, para la cual te puedes ayudar del pie para mantenerla en su sitio. Coloca los tornillos, comenzando mejor por alguno de abajo. Una vez colocados, apriétalos en forma de X. Eso sí, ten mucho cuidado con apretar en exceso los tornillos, ya que podrían partirse, sobretodo si usamos el peso de nuestro cuerpo para ayudarnos.
11- Una vez realizada toda la operación recogemos las herramientas, la rueda y los triángulos si los hemos usado. Luego, te recomendamos pasar por una gasolinera y comprobar la presión de la rueda de repuesto para garantizar que es la correcta y que circulamos de forma segura.
12- Es importante que sepas que las ruedas de repuesto suelen llevar una pegatina con un número. Este suele ser 80 e indica el límite de velocidad de uso de esa rueda, por lo que no debemos sobrepasarlo.
5 cosas que debes saber antes de cambiar una rueda pinchada
- Según la Ley de Tráfico y Seguridad Vial: “todos los turismos que circulen deben llevar una rueda completa de repuesto o una rueda de uso temporal, con las herramientas necesarias para realizar el cambio, o bien un sistema alternativo que ofrezca las suficientes garantías para que el vehículo se pueda mover”
- Si nos damos cuenta de que alguna de las ruedas ha sufrido un pinchazo, hay que parar el coche de inmediato, ya que continuar circulando en estas circunstancias supone un grave peligro.
- En lo que la vía y del tráfico lo permitan, debemos detener el vehículo y posicionarlo lo más alejado posible de la carretera. De esta forma, evitaremos posibles accidentes.
- Si no hay espacio suficiente para cambiar la rueda con la máxima seguridad, lo mejor es llamar a la compañía aseguradora para que envíen a un profesional que nos preste asistencia en el traslado a un taller.
- Como dijimos anteriormente, es obligatorio ponerte el chaleco reflectante antes de bajar del coche, incluso si es de día y las condiciones de visibilidad son altas.