La ventilación es un aspecto fundamental en el día a día. Hemos crecido escuchando que hay que abrir las ventanas para que, entre el aire, pero últimamente se le ha dado una especial atención a este aspecto, producto de la pandemia de Covid-19.
Una de las recomendaciones para evitar los contagios es siempre mantener los espacios bien ventilados, pero ¿qué pasa cuando se trata de espacios empresariales? En casa podemos abrir las ventanas, prender un ventilador o el aire acondicionado, si lo que queremos es sentirnos más cómodos en los meses de calor, la gran diferencia es que en los lugares de trabajo dependemos de muchos otros factores que no influyen cuando estamos en nuestro hogar.
La ventilación no es un aspecto que pueda considerarse secundario, ya que existe una normativa legal que la regula y que, de no cumplirse, puede acarrear grandes multas a la empresa, aunque este no sea el mayor de los problemas. Al ser este un punto tan delicado a tratar, hemos contactado con los profesionales de Prada Ingenieros quienes cuentan con una amplia experiencia en proyectos de ventilación en espacios empresariales.
¿Cuál es la importancia de la ventilación en los espacios empresariales?
Las empresas están obligadas a crear espacios seguros para sus trabajadores, por lo que disponer de un adecuado sistema de ventilación es uno de los elementos fundamentales en cualquier entorno laboral. A su vez, esta es una de las principales medidas de prevención de riesgos laborales para garantizar un entorno saludable y cómodo para la plantilla que hace vida en la compañía.
Los proyectos de ventilación dependen de la función que vaya a cumplir, estos se pueden distinguir entre un sistema de ventilación para el control de calor con el fin de evitar situaciones de estrés térmico (de lo que hablaremos a profundidad en el siguiente apartado) y ventilación por dilución, cuya finalidad es la de diluir el aire contaminado con la inyección de aire limpio, de manera que se mantengan unos niveles saludables en cuanto a la calidad del aire interior en el espacio de trabajo.
Si hablamos de los sistemas de ventilación mecánica controlada con recuperación de calor ofrecen, podemos considerarlos como una solución óptima y eficaz para el control de la temperatura, ya que proporcionan aire fresco y limpio en el espacio de trabajo, a través de una tecnología altamente eficiente en lo que se refiere a energía.
¿Cuáles son las consecuencias de una mala ventilación en la salud de los trabajadores?
Es evidente que, si existe un problema de ventilación en un lugar de trabajo, pueden presentarse problemas de salud en la plantilla de trabajadores. Si tomamos de nuevo el ejemplo del Covid-19, esta es una enfermedad que es altamente contagiosa, sobre todo en espacios cerrados y sin ventilación. Sin embargo, el Covid-19 no es la única enfermedad que puede producirse por culpa de un sistema de ventilación deficiente, algunas de las consecuencias en materia de salud pueden ser:
- Hipoxia: Se define como la deficiencia de oxígeno en la sangre, células y tejidos del organismo, que tiene como resultado una alteración de sus funciones. Esta deficiencia de oxígeno puede darse por muchas causas, como la inhalación de gases y el consumo de tabaco, pero una de las causas más comunes es la mala ventilación de espacios cerrados.
- Anoxia: En este caso se trata de la falta casi por completo de oxígeno en el cerebro, esto puede ocasionar posibles lesiones neurológicas de gravedad. La parada cardíaca es la causa más común de daño cerebral por anoxia, si bien esto ocurre por una mala ventilación, un espacio mal ventilado puede empeorar la condición de quien haya sufrido la parada.
- Afecciones respiratorias: Esta patología es consecuencia de una mala ventilación, y por lo general se trata de complicaciones relacionadas con la respiración como congestión nasal o asma. Otro problema respiratorio que se dan con frecuencia en espacios mal ventilados es la tos alérgica, seca, que se presenta por largos períodos de tiempo.
- Aspergilosis: Es una infección de las cavidades pulmonares provocada por un hongo llamado aspergillus que crece en vegetación es descomposición. Esta enfermedad puede provocar un sangrado pulmonar que puede llegar a ser fatal. Es una de las patologías más comunes provocadas por una mala ventilación, ya que consiste en la proliferación de hongos en el sistema respiratorio, estos microorganismos se acumulan en el aire que respiramos si el sistema de ventilación no funciona de la forma adecuada.
Dentro de este punto, tenemos que destacar de forma especial el Estrés Térmico, este término es utilizado especialmente en referencia al ámbito laboral y corresponde a la carga neta de calor a la que los trabajadores están expuestos en el cumplimiento de sus labores. Es el resultado de la combinación de las condiciones propias del lugar en el que trabaje, las características de la vestimenta que llevan y la actividad física que realizan a lo largo de su jornada laboral.
Entender esto es fundamental ya que si el nivel de estrés térmico de un trabajador es medio o moderado puede dificultar la realización de sus obligaciones, pero si este se aproxima a los límites de tolerancia del cuerpo humano, aumenta la posibilidad de riesgo de trastornos derivados de la exposición al calor, lo que obviamente pone la salud del trabajador en peligro. En cualquiera de los casos, se debe tener presente que una sobrecarga térmica no se puede predecir a través de los niveles de estrés térmico ya que, en este particular influyen factores y particularidades de cada individuo.
Estos factores (que pueden variar en el tiempo) son los que determinan la capacidad fisiológica de respuesta al calor. Entre los factores que es fundamental tener en cuenta y que ayudan a los especialistas a determinar el estrés térmico potencial en un espacio laboral podemos destacar:
- La velocidad del aire.
- La radiación
- La temperatura del aire.
- La humedad relativa.
- La actividad metabólica.
- El tipo de ropa
Como hemos podido ver, el estrés térmico es un punto que debe ser tomado en cuenta, cuando se están evaluando los sistemas de ventilación, pues de este dependerá mucho del tipo de trabajo que se necesita para hacer del entorno laboral, uno seguro.
Si lo que se quiere es un lugar en el que los riesgos de estrés térmico sean mínimos para las personas que trabajan en él, lo más aconsejable es realizar una serie de controles mientras se toman las medidas necesarias que ayuden a funcionar como agentes preventivos de golpes de calor y otros efectos negativos sobre la salud por una excesiva exposición al calor.
Algunas de las medidas que pueden tomarse, son las siguientes:
- Ventilación eficiente: esto puede ser bien a través de la ventilación natural o a través de sistemas de ventilación mecánica. En este caso es necesario aumentar la transferencia de calor desde la piel al exterior, y para ello se necesita un aumento de la velocidad del aire, ya que esto ayuda a la pérdida de calor al facilitar la evaporación del sudor.
- Instalación de sistemas que renueven y ayuden con la circulación del aire: se debe buscar disminuir, en la medida de lo posible, todos aquellos procesos que liberan vapor de agua y calor. En este caso se recomienda la instalación de pantallas en las fuentes de calor.
Siguiendo con el punto anterior, reducir el calor radiante mediante barreras de materiales que reduzcan la radiación térmica es una opción muy inteligente. Ya que, si no es posible aislar las fuentes de calor mediante pantallas y la radiación térmica es muy intensa, el mejor consejo que podemos dar es que los empleados usen ropa que proteja su piel.
- El vestuario laboral es fundamental, ya que en situaciones en las que la temperatura del aire sea superior a la temperatura de la piel (lo que significa que el cuerpo está funcionando bajo calor), es importante que los tejidos de la ropa sean permeables, esto es para que se pueda dar la evaporación del agua de la superficie de la piel como vía para la pérdida de calor.
- Crear políticas dentro de la empresa que normen y establezcan los tiempos de exposición a los focos de calor o radiación aceptables para los trabajadores. A su vez las autoridades responsables de la seguridad de los trabajadores deben contemplar tiempos de recuperación suficientes y limitación de la carga física.
La importancia de la ventilación puede parecer bastante tácita, ya que es evidente que el cuerpo humano necesita del oxígeno para poder vivir, sin embargo, consideramos necesario que sepamos cómo puede afectar a la salud una mala ventilación, para que como trabajadores estemos conscientes de los riesgos, así como de la responsabilidad que tenemos de ser garantes de que nuestro espacio laboral cumpla con la normativa.
Lo que sí es destacable es que como trabajadores nuestra labor depende de las condiciones que la empresa nos garantice, pues la responsabilidad de crear espacios seguros y sanos, recae en ellos, de lo contrario, no solamente corren el riesgo de ser sancionados por las autoridades competentes, sino también a que ocurran accidentes laborales que afecten la salud de su activo más importante, los trabajadores.