Creativa

Llega el frío, ¿has aislado ya tu casa?

Llega el otoño y las temperaturas comienzan a bajar, y muchos notamos ese frío molesto que se cuela por todos los rincones de nuestra casa.

¿Cómo lo combatimos? Una de las formas más efectivas es asegurarse de que cuenta con un buen aislamiento.

Pero, ¿Qué significa realmente aislar la casa y por qué es tan importante?

¿Qué es el aislamiento de una vivienda?

El aislamiento de una vivienda es el conjunto de medidas y materiales utilizados para reducir la transmisión de calor, sonido o humedad entre el interior y el exterior de una vivienda, mejorando su confort y eficiencia energética.

Cuando una casa está bien aislada, el frío del invierno no entra, mientras que el calor generado por la calefacción se mantiene en el interior durante más tiempo. De manera similar, en verano, un buen aislamiento ayuda a que el calor del exterior no penetre en el hogar, manteniendo un ambiente más fresco sin necesidad de usar tanto aire acondicionado.

El aislamiento no solo afecta a las paredes, sino también a otros puntos clave de la casa, como el techo, el suelo, las ventanas y las puertas. Cada uno de estos elementos es susceptible de ser aislado de forma eficiente para que la casa mantenga una temperatura agradable en cualquier época del año.

Tipos de aislamiento

Esto va a depender en gran medida de qué tipo de aislamiento y de cuánto tiempo (y ganas) dispongas para hacerlo.

1. Aislamiento sin obras

Si no se quiere emprender reformas importantes, hay opciones para mejorar el aislamiento de manera rápida y sin obras:

  • Burletes y selladores: Los expertos en reformas integrales y aislamientos, Crea Sur, nos aconsejan optar por soluciones sin obras, como burletes, cortinas térmicas o láminas aislantes, para mejorar el confort y la eficiencia energética de la vivienda de manera rápida y sencilla, porque ayudan a bloquear corrientes de aire. Son fáciles de instalar y una solución económica.

  • Cortinas térmicas: Estas cortinas están fabricadas con materiales que ayudan a mantener la temperatura interior, evitando la entrada de frío o calor excesivo.

  • Aislantes para ventanas: Se pueden aplicar láminas aislantes en las ventanas, que reducen la pérdida de calor. Son fáciles de instalar y mejoran notablemente la eficiencia energética.

  • Alfombras y moquetas: Cubrir los suelos con alfombras gruesas o moquetas ayuda a aislar del frío que proviene del suelo, mejorando el confort.

 

2. Aislamiento con pequeñas reformas

Este tipo de aislamiento implica algunos trabajos menores, pero sin necesidad de grandes obras:

  • Inyección de aislante en cámaras: Si las paredes tienen una cámara de aire, se puede inyectar material aislante, como espuma de poliuretano o celulosa, para mejorar el aislamiento sin necesidad de hacer grandes modificaciones estructurales.

  • Cambio de ventanas: Instalar ventanas con doble o triple acristalamiento es una forma efectiva de reducir la pérdida de calor y evitar ruidos. Aunque supone una pequeña reforma, los beneficios en eficiencia energética son altos.

3. Aislamiento con obras importantes

Para un aislamiento más completo, es posible que se necesiten obras más grandes. Estas suelen ser necesarias en viviendas con problemas serios de pérdida de energía:

  • Aislamiento de fachadas: Puede hacerse mediante un sistema de aislamiento térmico exterior (SATE) o colocando paneles aislantes en la parte interior de las paredes. Esta opción suele ser muy efectiva, pero requiere obras significativas.

  • Aislamiento de techos y suelos: Para mejorar el confort térmico, se pueden instalar materiales aislantes en techos y suelos, lo que implica levantar suelos o abrir techos, pero garantiza una solución eficaz para el aislamiento integral de la vivienda.

¿Por qué es importante aislar una vivienda?

Además de para llegar a casa del trabajo tras una larga y cansada jornada y encontrártela calentita y cómoda, existen muchas otras razones a tener en cuenta:

1. Ahorro energético: Una casa mal aislada pierde una gran cantidad de calor en invierno y de fresco en verano. Esto significa que los sistemas de calefacción y aire acondicionado deben trabajar más, lo que incrementa el consumo energético y, por tanto, las facturas. Un buen aislamiento puede reducir hasta en un 30% los gastos en calefacción y aire acondicionado, lo que supone un importante ahorro a largo plazo.

2. Confort: Una casa bien aislada es sinónimo de confort. En invierno, el hogar se mantiene más cálido y acogedor, sin necesidad de estar continuamente ajustando la temperatura de la calefacción. En verano, por otro lado, una buena protección térmica evita que el calor excesivo del exterior se cuele en la casa, manteniendo un ambiente fresco y agradable.

3. Menor impacto ambiental: El ahorro energético que proporciona un buen aislamiento no solo se traduce en un alivio para el bolsillo, sino también para el planeta. Menos consumo de energía implica una menor emisión de gases contaminantes, lo que contribuye a la lucha contra el cambio climático.

4. Salud: Una casa bien aislada también ayuda a evitar problemas de humedad, que pueden derivar en la aparición de moho. El moho no solo afecta a la estructura de la vivienda, sino que puede causar problemas respiratorios y alergias en los habitantes, especialmente en personas sensibles como niños o ancianos.

¿Es obligatorio aislar una vivienda?

En España, el aislamiento de las viviendas no es obligatorio en todas las situaciones, pero existen normativas que promueven la eficiencia energética en los edificios. El Código Técnico de la Edificación (CTE) establece que todas las nuevas construcciones deben cumplir con ciertos requisitos de aislamiento térmico para garantizar un uso eficiente de la energía.

Además, desde 2020, los edificios de nueva construcción deben ser de consumo energético casi nulo, lo que implica que deben tener un aislamiento muy eficiente. En cuanto a las viviendas ya construidas, aunque no es obligatorio realizar mejoras en el aislamiento, sí se recomienda hacerlo, especialmente cuando se realizan reformas importantes en la vivienda.

Por otro lado, existen ayudas y subvenciones para mejorar el aislamiento de las viviendas, ya que esta medida contribuye a reducir las emisiones de CO₂ y a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Es recomendable consultar con el ayuntamiento o la comunidad autónoma las posibles ayudas disponibles.

¿En qué zonas de España es más necesario aislar bien una casa?

El clima en España es muy variado, y esto influye en la necesidad de tener un buen aislamiento en las viviendas. A continuación, se detalla en qué zonas del país es más importante prestar atención al aislamiento.

  • Zonas frías: En las zonas del interior del país, como Castilla y León, Aragón y zonas montañosas como los Pirineos o Sierra Nevada, los inviernos pueden ser muy duros, con temperaturas que caen por debajo de los cero grados durante varios meses. En estos lugares, un buen aislamiento térmico es imprescindible para mantener la vivienda caliente y evitar un gasto excesivo en calefacción.
  • Zonas con grandes variaciones de temperatura: En comunidades como Madrid o La Mancha, donde los veranos son muy calurosos y los inviernos fríos, es fundamental tener un buen aislamiento que permita mantener la casa fresca en verano y caliente en invierno. La amplitud térmica es muy acusada en estas zonas, y un mal aislamiento puede hacer que la vivienda sea incómoda durante gran parte del año.
  • Zonas húmedas: En zonas del norte de España, como Galicia, Asturias y el País Vasco, donde las lluvias son frecuentes, el aislamiento hidrófugo es fundamental para evitar problemas de humedad. Las viviendas en estas regiones deben estar bien protegidas para evitar filtraciones de agua y daños estructurales causados por la humedad constante.
  • Zonas cálidas: Aunque en zonas como Andalucía, Murcia o la Comunidad Valenciana el aislamiento térmico se asocia más al calor que al frío, también es muy importante. En estas zonas, el objetivo principal del aislamiento es evitar que el calor extremo del verano penetre en la vivienda, lo que permite mantener un ambiente fresco sin tener que abusar del aire acondicionado.

¿Cuándo es el mejor momento para aislar una casa?

El mejor momento para mejorar el aislamiento de una vivienda es antes de que llegue el frío o el calor intenso del verano, porque son las temperaturas que más nos van a incomodar.

La primavera y el otoño son estaciones ideales para realizar estos trabajos, porque las temperaturas son más suaves y las obras no nos van a resultar tan molestas.

Sin embargo, si se detectan problemas serios de aislamiento en pleno invierno, es mejor actuar lo antes posible para evitar mayores incomodidades y gastos en calefacción.

Se acerca el invierno, ¿has aislado ya tu casa?

Las temperaturas empiezan a bajar, y no hay nada peor que sentir el frío tu casa y que este no te deje descansar en condiciones.

Todavía estamos en otoño, así que es el momento perfecto para actuar. Sé que puede dar mucha pereza pensarlo siquiera, pero piensa qué es mejor: sacrificar ahora un poco de comodidad en pos de un invierno mucho más cómodo, o no calentarte ahora la cabeza… pero sufrir el frío durante todo el invierno y que tengas que pagar más en tu factura de la luz.

¡No lo dejes para más tarde!

Asegúrate de tener tu casa lista y disfruta de un invierno mucho más agradable y cómodo.

Comparte esta publicación
Facebook
Twitter
LinkedIn
Más comentados

Una visita por Ponferrada

Si tienes pensado hacer una escapada en las próximas semanas, nuestra recomendación de hoy es que visites Ponferrada. Una localidad de El Bierzo con muchos

El transporte de mascotas

El transporte de mascotas por vía aérea cada vez es algo más solicitado. En este sentido hay empresas que llevan dedicándose a ello desde hace

Categorías

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies