¿Por qué deberíamos limitarnos a disfrazarnos solamente en Carnaval, en Halloween o en una despedida de soltera o soltero? Hasta hace no demasiado tiempo, eran los únicos eventos en los que la gente solía valorar ponerse un disfraz, seguro que todavía guardáis recuerdos y disfraces de esa época. Pero las cosas han cambiado. ¡Vaya si lo han hecho! Ahora, parece como si estuviéramos buscando excusas para disfrazarnos y para estar continuamente fuera de casa disfrutando de alguna fiesta relacionada con esto. Y la verdad es que no es de extrañar en absoluto. Después de la pandemia, nadie está escatimando en disfrutar.
La época que ya tenemos encima, la Navidad, es una de las que ha ganado muchos enteros en lo que tiene que ver con la necesidad de disfrazarse. Ha sido una época que no ha sido totalmente ajena a ello porque siempre había gente que decidía disfrazarse de Papá Noel o algo similar, pero la verdad es que ahora esa fiebre se ha multiplicado por mucho. Ahora, lo que ha pasado a ser más raro es que no nos hayamos disfrazado una vez que ha pasado la Navidad. Seguro que lo habéis hecho en alguna de las Navidades más recientes y que ese ha sido uno de los motivos por los que más habéis disfrutado en una época del año como esta.
Una de las mejores maneras que tenemos de demostrar que esto es así es echar mano de alguna noticia como la que voy a compartir a continuación y que se publicó en el portal web de El Periódico de España en la Navidad del año pasado. En ella, se garantizaba que muchas personas se habían disfrazado de Papá Noel en ciudades como Pontevedra, Vigo o Granada para alegrar las fechas en las que nos encontrábamos. Y es que la papanoelada, como se ha empezado a denominar la concentración de disfraces sobre el “abuelo” más típico y mágico de la Navidad, ya empieza a adquirir el rango de tradición.
Otra de las cosas que se empiezan a considerar como una tradición es el hecho de que las personas que acudan a ver en vivo el Sorteo de Navidad en el Teatro Real también se disfracen. De eso versa la noticia que os dejamos a continuación y que fue publicada en la página web de El Español. Ni que decir tiene que estamos hablando de una tradición que se empieza a consolidar y que, desde luego, supone un motivo de alegría en un momento tan especial como lo es el chupinazo de apertura de la Navidad, que ya sabéis que siempre suele ser este Sorteo.
Y es que queremos tener motivos para disfrutar. Hay que ser claros: hemos sido siempre un país en el que la alegría ha caracterizado a muchas personas, de eso no nos cabe la menor duda, pero también hay que decir que, después de la pandemia, hemos salido dispuestos a disfrutar de cualquier cosa que tenga que ver con el disfrute de una fiesta popular como lo es la Navidad. Es lógico, para qué nos vamos a engañar. Queremos recuperar el tiempo perdido, aunque ya llevemos varias Navidades sin restricciones. Pero aquello nos hizo valorar mucho más el tiempo que tenemos para nosotros y para disfrutar de la vida.
La alegría, en muchas ocasiones de la vida, ha venido acompañada de un disfraz. Tengamos en cuenta el tipo de situaciones en las que nos solemos disfrazar. Carnaval y Halloween son las dos festividades típicas de este asunto, dos fiestas que están más de moda que nunca y que la gente espera con ansia durante todo el año para exhibir sus disfraces. Luego también tenemos todo lo que rodea a las despedidas de soltero o soltera, en la que los disfraces han ido ganando presencia a medida que han pasado los años. Y, para rematar, podemos hablar de la importancia cada vez más creciente de los disfraces en eventos tan cotidianos como los cumpleaños.
Esto ha hecho que el número de compras que hacemos a lo largo del año en esta materia haya crecido. Lo que antes era un par de compras a lo largo del año, ahora son por lo menos el doble porque, además de lo que ya hemos comentado, no queremos repetir en absoluto un disfraz de un año para otro. Queremos ser los más originales y eso implica cambiar cada año.
Una de las compras más típicas de un momento del año como la Navidad es un disfraz. Y estamos convencidos de que muchos de vosotros y vosotras queréis ser originales y apostar por algo diferente al disfraz de Papá Noel, que es lo que suele ser habitual en este momento del año. Echando un vistazo a la web de La Casa de los Disfraces, podemos ver que la variedad ha crecido mucho en este sentido: los disfraces de San José, de ayudante elfa, de mamá Noel, de monstruo de la Navidad o de pastor se han convertido en los reyes de este momento del año. Y si encima se le da facilidades a la gente, como realizar el envío gratis y en menos de un día, pues no resulta raro que todo el mundo quiera comprar un disfraz para sacarle el máximo rédito posible a la Navidad.
Hay que decir que hay muchas cosas que motivan a la gente a comprar disfraces, pero que el apogeo de la compra online es uno de los argumentos más grandes que han conducido a que eso sea posible. El hecho de que ahora no haga falta salir de casa para informarse sobre los disfraces que hay disponibles, para adquirirlos e incluso para recibirlos, hace que muchos y muchas adquiramos ya no solo disfraces, sino un montón de cosas más. La verdad es que merece y mucho la pena que tengamos la posibilidad de adquirir este tipo de productos en un solo clic. Los resultados de esas facilidades se ven cuando salimos de casa en Navidad y nos damos cuenta de que hay mucha gente que camina por la calle y que va disfrazada.
El momento del año de más consumo
Favorece y mucho a la compra de disfraces en Navidad que estemos hablando de una época del año en la que más consumo hay. Tengamos en cuenta que estamos hablando de un momento en el que compramos regalos para nuestros familiares y amigos, comida para disfrutar de unas cenas de Nochebuena y Nochevieja y unas comidas de Navidad y Año Nuevo perfectas y también, por ejemplo, lotería para los sorteos de los días 22 de diciembre y 6 de enero.
Es de justicia reconocer que el inicio de la campaña navideña suele ser el Black Friday, que es el momento en el que toda esa enorme cantidad de compras navideñas comienza. Durante la última semana de noviembre y todo el mes de diciembre, la facturación de un montón de entidades se dispara y, de hecho, muchas de las personas que saben que van a gastar más de la cuenta esperan esos momentos durante meses. Y es que no hay momento mejor que este para adquirir todas esas cosas con las que una vez soñamos y que pensamos que van a mejorar nuestro día a día o que van a ser especiales para un momento dado, como ocurre con los disfraces.
Todo el mundo está convencido de que, esta Navidad, los registros de facturación de una gran cantidad de empresas van a crecer con respecto a los registros del año pasado. Y es que somos cada vez más las personas que vemos en la Navidad un momento idóneo para adquirir todas esas cosas que quizá en otro momento del año no hemos querido comprar. Sabemos que es una época especial y la queremos vivir sin ataduras. Es lo que nos merecemos después de un año de muchos esfuerzos y algún que otro sacrificio, ¿no os parece?
Hay momentos en los que creemos que es mejor vivir el momento y no estar tan pendientes de nuestro bolsillo. Por supuesto, esto último es elemental para tener la vida que queremos, no hay ninguna duda, pero tened en cuenta que la vida está para disfrutarla y que hay momentos en los que simplemente no tenemos que escatimar en disfrutar de aquello que queramos. El recuerdo que esos momentos nos van a dejar será excepcional y nos hará felices, que a fin de cuentas es lo que importa en esta vida.
Un disfraz nos puede ayudar mucho a la hora de conseguir esa felicidad de la que estamos hablando y para construir esos momentos que simplemente con recordarnos nos van a sacar una sonrisa. Ojalá que, a lo largo de estas fiestas, tengamos la posibilidad de conseguir esos argumentos para esbozar sonrisas. Eso es lo que hace falta en este mundo, un mundo en el que la mayoría de las noticias que vemos por la tele o por las redes sociales son negativas y generan preocupación entre nosotros y nosotras.