Creativa

La cara tecnológica que aborda las impurezas del agua.

En un mundo donde cada vez somos más conscientes de la importancia de beber agua pura y segura, también buscamos soluciones tecnológicas que sean prácticas y respetuosas con el planeta. Una de estas soluciones es la ósmosis inversa de flujo directo, una tecnología que está revolucionando la forma en que accedemos al agua potable en nuestras casas y empresas.

Sin embargo, no todos hemos oído hablar de ella, y puede que incluso no entendamos bien a priori qué significa sin una buena explicación.

De modo que, si nunca habías escuchado este término, no te preocupes, vamos a explicarlo de manera clara y sencilla para que comprendas por qué esta tecnología es tan innovadora y cómo podría mejorar tu vida diaria.

¿Qué es la ósmosis inversa?

La ósmosis inversa es un proceso de purificación de agua basado en principios naturales, pero aplicado de forma ingeniosa mediante tecnología moderna. Para entenderlo, es útil comenzar con el concepto de ósmosis, un fenómeno que ocurre en la naturaleza. En la ósmosis, el agua se mueve de una solución con baja concentración de solutos (como sales) a una solución con alta concentración a través de una membrana semipermeable. Este movimiento natural busca equilibrar las concentraciones a ambos lados de la membrana.

De este modo, la ósmosis inversa, como su propio nombre indica, invierte este proceso natural. Aquí, se aplica presión al agua de la solución más concentrada (por ejemplo, agua del grifo con impurezas) para forzarla a pasar a través de una membrana semipermeable en dirección contraria a la ósmosis normal. Esta membrana actúa como un filtro ultrafino, que permite el paso de moléculas de agua, pero bloquea partículas más grandes como sales, metales pesados, bacterias y otros contaminantes.

El resultado es agua purificada, libre de impurezas dañinas y con un sabor mucho más limpio. Este proceso se utiliza ampliamente tanto a nivel doméstico como industrial debido a su utilidad y capacidad para eliminar una amplia variedad de contaminantes.

Entre los elementos que elimina destacan:

  • Sales disueltas y minerales no deseados.
  • Metales pesados como plomo y mercurio.
  • Sustancias químicas como pesticidas y cloro.
  • Microorganismos como bacterias y virus.

La ósmosis inversa tiene su origen en aplicaciones industriales y militares durante el siglo XX, donde se requería agua pura en lugares con acceso limitado a fuentes de calidad. Con el tiempo, su uso se extendió al ámbito doméstico, convirtiéndose en una de las tecnologías más fiables para mejorar la calidad del agua potable.

La revolución del flujo directo.

En este punto, es donde entra en juego la ósmosis inversa de flujo directo. A diferencia de los sistemas tradicionales, esta tecnología no requiere un depósito de almacenamiento. En su lugar, el agua se filtra en el momento en que la necesitas, proporcionando agua pura al instante.

¿Cómo lo logra? Gracias a bombas de alta presión y membranas más avanzadas, este sistema puede producir agua filtrada directamente desde la red, eliminando la necesidad de guardar el agua previamente. Esto no solo ahorra espacio en tu cocina o lugar de trabajo, sino que también reduce el riesgo de contaminación bacteriana.

Además, el flujo directo garantiza que cada vaso de agua que consumes esté recién filtrado, lo cual es especialmente importante para las personas que exigen una calidad constante, ya que elimina la preocupación de que el agua haya perdido frescura por estar almacenada.

¿Dónde se puede utilizar esta tecnología?

La flexibilidad de la ósmosis inversa de flujo directo la hace adecuada para una amplia gama de aplicaciones; esta tecnología se adapta a diferentes necesidades:

  • Hogares: como bien afirman los expertos de Agua Controlada, la ósmosis inversa doméstica es perfecta para aquellos que quieren agua pura para beber y cocinar sin preocuparse por la calidad del agua del grifo.
  • Restaurantes y cafeterías: ideal para mejorar el sabor de las bebidas y la calidad de los alimentos preparados.
  • Clínicas y hospitales: donde la pureza del agua es imprescindible para garantizar la seguridad de los pacientes.
  • Industrias tecnológicas: en sectores que requieren agua ultrapura para procesos delicados, como la fabricación de microchips.
  • Laboratorios: donde se necesita agua libre de impurezas para experimentos y análisis precisos.

De hecho, en entornos como los hospitales el agua purificada no solo se utiliza para beber: también se emplea en procesos de limpieza de instrumentos médicos, garantizando que no queden residuos dañinos en equipos delicados.

Ventajas de la ósmosis inversa.

Lo que hace tan especial a esta tecnología es la combinación de aptitud, comodidad y sostenibilidad.

Aquí tienes algunos de sus beneficios más destacados:

  • Agua pura al instante: ya no tienes que esperar a que un depósito se llene o preocuparte por si queda suficiente agua almacenada.
  • Ahorro de espacio: sin un depósito de almacenamiento, el sistema ocupa menos espacio, ideal para cocinas pequeñas o negocios con poco sitio disponible.
  • Mayor higiene: al eliminar el depósito, también eliminas un posible foco de bacterias, garantizando agua fresca cada vez que abres el grifo.
  • Sostenibilidad: estos sistemas suelen ser más prácticos en el uso del agua, generando menos desperdicio comparado con los modelos tradicionales.
  • Facilidad de instalación: aunque puede requerir asistencia profesional, la instalación es generalmente más sencilla y menos invasiva que otros sistemas.

¿Cómo se posiciona respecto a su precio? ¿Es fácil de instalar?

La ósmosis inversa directa es un sistema muy avanzado ideal para múltiples usos, tanto en el hogar como en aplicaciones industriales: en el ámbito doméstico, los precios pueden variar entre 150 y 500 euros según el modelo y la capacidad. Estos sistemas suelen ser más caros que los tradicionales debido a su diseño sin tanque de almacenamiento, consiguiendo un flujo constante de agua purificada.

La instalación puede ser más compleja que en otros sistemas, ya que requiere conexión directa al suministro de agua y a la red de desagüe. Aunque algunos modelos permiten una instalación fácil, lo más recomendable es contar con un profesional para garantizar que todo funcione correctamente (sobre todo para evitar posibles problemas con las conexiones de fontanería). En general, la instalación se basa en conectar el sistema a la red de agua, instalar la válvula de desagüe y garantizar que el sistema esté bien sellado para evitar fugas.

De este modo, a pesar de que al principio pueda parecer que gastamos mucho, lo cierto es que a largo plazo se nota la diferencia: sólo en términos de ahorro de agua y energía, puede hacer que la inversión sea rentable. Por si fuera poco, a continuación, destacaremos por qué nuestra salud también estará más cuidada.

¿Y por qué es bueno beber agua purificada?

La purificación del agua no se tiene en cuenta porque sí: tiene una razón de ser. Y es que, aunque el agua del grifo en muchas ciudades puede considerarse potable, lo cierto es que no siempre está exenta de elementos que pueden afectar nuestra salud a largo plazo o incluso nuestro disfrute inmediato al consumirla.

Veamos algunas razones de peso para elegir beber agua purificada en lugar de beber agua “del grifo”:

  • Eliminación de contaminantes.

El agua purificada (especialmente la obtenida mediante ósmosis inversa) elimina hasta un 99% de los contaminantes presentes en el agua del grifo. Estos incluyen cloro, metales pesados como el plomo o el mercurio, pesticidas y microorganismos como bacterias y virus. Aunque en pequeñas cantidades estos contaminantes pueden no causar daños inmediatos, su acumulación puede tener efectos negativos en nuestra salud a largo plazo.

  • Mejora del sabor y el olor.

El cloro, que se utiliza comúnmente para desinfectar el agua, puede dejar un sabor y olor desagradables. Al eliminar este compuesto, el agua purificada se vuelve más agradable para beber, cocinar o preparar bebidas como café y té.

  • Prevención de enfermedades.

En zonas donde la calidad del agua puede no ser la mejor, el consumo de agua purificada reduce el riesgo de contraer enfermedades relacionadas con microorganismos presentes en el agua. De hecho, a quien más afecta es a los niños o a las personas enfermas o mayores que presentan un sistema inmune debilitado, así que siempre es una mejor opción.

  • Mayor hidratación.

El agua purificada, al estar libre de partículas y sales no deseadas, es absorbida más fácilmente por el cuerpo, promoviendo una mejor hidratación. Esto es particularmente beneficioso para deportistas y personas con necesidades específicas de hidratación.

  • Buenas consecuencias para la piel y el cabello.

Si la usamos para lavar la cara o el pelo, evitaremos la exposición al cloro y a otros químicos que puedan resecar la piel y el cuero cabelludo, beneficiando además a personas con la piel sensible o con condiciones como dermatitis.

  • Apoyo al medio ambiente.

Beber agua purificada a través de un sistema doméstico reduce en gran medida la necesidad de comprar agua embotellada, lo que a su vez disminuye la producción de plásticos y su impacto ambiental.

Como punto extra, cabe destacar que el agua purificada es ideal para todo tipo de usos domésticos, desde la preparación de alimentos hasta el cuidado de plantas o incluso mascotas. Sin duda, es una inversión que impacta positivamente en cada aspecto de la vida diaria.

Comparte esta publicación
Facebook
Twitter
LinkedIn
Más comentados

El transporte de mascotas

El transporte de mascotas por vía aérea cada vez es algo más solicitado. En este sentido hay empresas que llevan dedicándose a ello desde hace

Categorías

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies