Hay un sector de actividad en España que viene siendo imprescindible en los tiempos que corren. Hablamos, como no podía ser de otra manera, del sector dedicado al turismo, que se ha convertido en la referencia indiscutible a nivel económico en nuestro país. Ese lugar que tradicionalmente había ocupado la construcción durante el siglo XX ahora lo ocupa un turismo que, además, es mucho más fiable debido a que, mientras que una persona tiene un número limitado de casas o propiedades, puede acudir a una determinada zona de nuestro país un número realmente grande de veces.
Es precisamente por eso por lo que creemos con firmeza que toda la gente que se dedique al turismo en nuestro país tiene un gran futuro por delante. La verdad es que no cabe la menor duda de que el turismo no es solo una manera de que nuestro PIB sea un dato realmente alentador, sino que también es importante que dé trabajo y oportunidades de desarrollo personal a toda esa gente que se ha mostrado interesada en realizar estudios en la materia. Y lo cierto es que la gran cantidad de visitantes que tiene un país como el nuestro es una oportunidad excelente para ello.
Sin embargo, hemos visto algunos artículos periodísticos en algunos medios de comunicación que no nos han dejado precisamente tranquilos:
- En primera instancia, un artículo del diario El País se preguntaba si de verdad no merecía la pena estudiar Turismo en nuestro país. La pregunta se la hacía tras un dato del Ministerio de Educación en el que se comentaba que uno de cada dos estudiantes de esta materia se termina dedicando a alguna actividad para la que no le hace falta ninguna cualificación.
- Otro artículo, en este caso publicado en el portal web Nius Diario, informaba de que, «en el país del sol y la playa», el grado de Turismo no es una garantía de colocación. La verdad es que esta es otra de las noticias que no nos gusta ver, pero no porque no sean reales, sino porque dejan claro que en España todavía tenemos muchas cosas para mejorar en el aprovechamiento de todos los recursos de los que disponemos para potenciar la industrian turística de esta nación.
En España, tenemos un clima que es idóneo para potenciar el turismo todavía más de lo que ya está. Pero está claro que estamos teniendo algún problema, porque muchos de los estudiantes de Turismo en nuestro país están en el paro. ¿Cómo es eso posible? Desde Formatic Barcelona, una escuela universitaria de Barcelona, nos han informado de que esta puede ser una de las explicaciones que tengan que ver con la falta de calidad de la educación pública. Lo cierto es que los estudiantes que provienen de esta entidad parecen estar teniendo bastantes más facilidades a la hora de encontrar un empleo.
No cabe la menor duda de que la calidad de la educación es un aspecto clave para conseguir que la gente consiga un empleo. Hay muchas personas, especializadas en recursos humanos y en el funcionamiento del mercado laboral, que nos han asegurado que, en efecto, la falta de calidad en algunos aspectos ligados a la educación termina siendo una de las explicaciones para que, por ejemplo en este asunto, haya tanto fracaso laboral. Y la verdad es que no podemos permitirnos el lujo de hacer que la generación más preparada de nuestra historia. Sería un error del que no nos podríamos recuperar en mucho tiempo.
Tenemos más potencial del que pensamos
La verdad es que en nuestro país está claro que existe potencial para el turismo, hablando desde el punto de vista de los recursos humanos que tenemos para ello. Hay muchas personas que sienten verdadera curiosidad por esta ciencia (porque, al final, el funcionamiento del sector requiere que sea denominado como tal) y son muchos los que viven desde que son pequeños en entornos que son turísticos por definición. La verdad es que tenemos que tener la capacidad para dotar a todas esas personas de la formación óptima para que puedan desempeñar una labor en el sector. Será esa la mejor manera de garantizar el crecimiento del mismo.
España va a seguir siendo un país eminentemente turístico con el paso de los años. A nadie le cabe alguna duda al respecto. Y es que tenemos demasiadas ciudades con un buen clima y buenas costas, pero es que además tenemos una historia que es envidiable, un turismo interior como del que no pueden presumir todos los países y, por si fuera poco, unas pistas de esquí que son de las mejores de Europa por mucho que la concepción general sea la de un país caluroso y con mucho sol.