Hay una máxima que todos tendríamos que tener en cuenta a la hora de plantear medidas para favorecer la creación de empleo no solo en el interior de nuestras fronteras, sino en todos los sitios: hay que facilitar la creación de empresas para tratar de conseguir que baje el nivel de desempleo que vive una sociedad como la española, que ha sido dada en muchas ocasiones a vivir situaciones de este estilo que además se han recrudecido por momentos. Y la verdad es que a todos nosotros nos ha tocado padecer alguna de ellas en algún instante de nuestra vida.
La verdad es que no cabe la menor duda de que, en un país como el nuestro, la burocracia ha tenido un impacto realmente negativo en lo que tiene que ver con la creación de empresas. Son muchos los papeles y los trámites que han tenido que realizar los responsables de los negocios para tratar de conseguir iniciar una actividad para la cual han tenido que realizar una inversión realmente grande. No cabe la menor duda de que eso resta potencia e inmediatez a todos los comercios que surgen en el interior de nuestras fronteras. No es una buena noticia.
El portal web Empresa Actual informaba, en una noticia, de que la creación de empresas en el año 2018 había sido de más de 90.000 unidades. Esta es una buena noticia, pero resulta imposible pensar en cuántas entidades podían haber surgido durante el mismo periodo de tiempo si desde las instituciones públicas se hubiese reducido el número de trámites que son requeridos para empezar a realizar la actividad que toque en cada caso. Y es que no cabe la menor duda de que cuanto más crece el número de trámites, menos crece el de empresas que arrancan.
Pero fijaos lo que apunta una noticia que fue publicada el pasado mes de agosto en el diario El Español. Aseguraba que, en el mes de junio, había decrecido el número de empresas por tercer mes consecutivo. Eso nos quiere decir algo, y es que el repunte de nuestra economía podía estar viviendo sus últimos coletazos. Para combatirlo, es evidente que hay que ponerles las cosas fáciles a los empresarios. Y poniendo más y más trámites, como ha venido sucediendo, no es la mejor manera de hacerlo ni mucho menos. Ya ha quedado claro es más de una y más de dos ocasiones.
En un momento en el que desde las instituciones públicas no se dan cuenta de la necesidad de reducir los trámites para facilitar la creación de empresas, los pequeños empresarios que quieren arrancar una actividad están contratando a personas especializadas en este tipo de trámites y asesoramientos para intentar empezar a sacar rédito de su actividad. Es lo que nos han comentado los profesionales de una entidad como lo es Trámites Fáciles Santander, una entidad especializada en este tipo de cuestiones y que ha recibido la llamada de una buena nómina de clientes potenciales en los últimos tiempos.
Y la verdad es que este trabajo es el que está permitiendo sobre todo a las pequeñas empresas iniciar su modelo de negocio. La importancia que esto tiene para la sociedad española es bastante grande, puesto que son las pymes las que generan una mayor cantidad de empleo y las que hacen que, de alguna manera, no existan monopolios, que son los verdaderos problemas que pueden llevar a un sector al encarecimiento de todos los productos que están asociados de una manera directa o indirecta con él. Desde luego, está claro que esto no beneficiaría a nadie.
El sector público tiene que cambiar su manera de actuar
Hay que tener claro que el sector público tiene que cambiar su manera de proceder ante este tipo de situaciones. No podemos seguir impidiendo que los emprendedores de este país se choquen contra un muro una y otra vez cuando tratan de iniciar un proyecto que, a fin de cuentas, va a resultar beneficioso para la sociedad en tanto en cuanto va a generar empleo y va a proporcionar productos o servicios que van a interesar a una buena cantidad de personas. No tiene ni sentido ni explicación.
La verdad es que nos encontramos en un momento en el que las empresas tienen más problemas que nunca a la hora de empezar a desarrollar su actividad. Creemos que no cuesta tanto hacer que el trabajo de los emprendedores, que ya de por sí es bastante complicado, sea algo más fácil y no haya tantas restricciones en lo que tiene que ver con la constitución de las empresas. Y es que no cabe la menor duda de que son los emprendedores los que más y mejor contribuyen a que el empleo sea una constante en una sociedad como la nuestra.